Dos recetas en una! Un risotto con dos sabores. El primero es un risotto de verduritas y el segundo es de champis.
El arroz arborio es el ideal para hacer risottos. Hoy en día ya se puede encontrar en casi cualquier super, así que os recomiendo que lo probéis.
La diferencia con otro arroz "normal", es la cantidad de agua a añadir. Por cada medida de arroz, ya sea una taza, un vaso..., se añaden 4 medidas de agua.
Así el arroz va soltando todo el almidón que hace que el risotto vaya espesando.
Bueno, me dejo de "rollos" .
- arroz arborio
- zanahoria
- pimiento verde
- guisantes
- caldo de verdura
- loncha de bacon
- queso, parmesano va bien
- tomillo
Las cantidades dependen de las personas que sean, pero hay que tener en cuanta la medida arroz-líquido.
Se puede hacer con agua o bien con una caldito de verduras, que queda mejor.
Picamos toda la verdurita finamente al igual que el bacon.
Ponemos un poco de aceite en una sartén grandecita, ya que haremos el risotto en ella. Pochamos la verdurita y el bacon, cuando este más o menos hecha, añadimos el arroz, lo rehogamos todo junto un par de minutos y empezamos a añadir el caldo.
Este paso es importante, el caldo hay que añadirle poco a poco. Empezamos con una medida de caldo y vamos removiendo, cuando veamos que el arroz ha absorbido todo el caldo, añadimos otra medida, y removemos, y así sucesivamente hasta completar todas las medidas del líquido.
Antes de añadir la última taza de caldo, añadimos el queso rallado y mezclamos bien. Al final tiene que quedar un arroz cremosito.
Solo nos queda poner una ramita de tomillo, que le va muy bien, y ya está!
La otra receta es similar, lo único que cambia, es la verdura por los champis, pero la manera de hacerlo es la misma.
Queda muy rico, y tampoco se tarda mucho más en hacer que un arroz "normal", así que a por el risotto!
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